Resumen

Se plantea la necesidad de contar con indicadores claros y objetivos que permitan evaluar oportuna y eficientemente el comportamiento reproductivo de un rebaño lechero.

Se mencionan los defectos de algunos en uso, proponiéndose dos nuevos elementos para medir y calificar en forma dinámica la fertilidad, utilizando los registros de uso normal en cualquier explotación.

Ellos permitirían detectar en forma temprana los cambios de situaciones (nutricionales, de manejo etc..) que afectan este importante aspecto, lo cual debe constituir parte de la rutina en toda asesoría.

Debe hacer notar el autor que la obtención de estos indicadores no le representa mas de 30 minutos para un plantel tipo de 100 vacas, contando con los registros perrtinentes.

Introducción

Constituye un axioma afirmar que el comportamiento reproductivo de todo rebaño es uno de los pilares en que se fundamentan las explotaciones ganaderas, ya sea para leche o carne. Refiriéndonos a las primeras, podemos mencionar resumidamente sus efectos:

I. A través de la puesta en marcha y mantención de adecuadas curvas de lactancias, referido a nivel productivo y persistencia, en alternancia con los correspondientes períodos secos. Baste mencionar que existe concordancia entre diferentes estimaciones referentes a pérdidas de producción con el aumento del lapso parto-preñez.

II. Como fertilidad propiamente tal, por su influencia en la estructura, desarrollo y calidad del rebaño productivo por su efecto en:

 Causas de eliminaciones no deseadas y por tanto el tiempo de permanencia de las hembras en el plantel. A mejor fertilidad, disminuye la eliminación no deseada, permitiendo una mayor permanencia de aquellas hembras que se quiere preservar por sus condiciones, quedando así mayor libertad para las eliminaciones selectivas (bajo nivel productivo, sanitarias etc.). Generación de reemplazos suficientes como para permitir:

a) Suplirlas eliminaciones obligadas b) Crecimiento del rebaño, al quedar un excedente cumplida la meta anterior. c) Opcionalmente, disponer de hembras para venta en mejores condiciones económicas.

Primeramente, debemos tomar en consideración que múltiples estudios han concluido que las alteraciones en la fertilidad pueden deberse a factores que podrían considerarse como fisiopatológicos propios del animal, pero en mayor medida son consecuencia de lo que podría denominarse 'patología del manejo'

Es por ello que siempre es conveniente tener presente que la fertilidad, está determinada en grado importante por factores de manejo y observación, por lo que su resultado en gran medida constituye un parámetro de evaluación del nivel de manejo general de la explotación.

La necesidad para estructurar un programa reproductivo con metas definidas requiere como condición básica disponer de indicadores que permitan calificar el funcionamiento reproductivo en forma adecuada, de acuerdo a las siguientes características:

a) Permitan identificar claramente los períodos de tiempo a que se aplican. b) Posean la sensibilidad necesaria para reflejar las variaciones en los tiempos deseados. c) Informen el nivel alcanzado de acuerdo a patrones establecidos de eficiencia.

Esto con el objeto de poder detectar en forma oportuna y objetiva situaciones deficientes, identificar las causas y buscar su corrección.

Para las explotaciones de crianza por ejemplo, es más sencillo medir puesto que generalmente se trabaja con períodos cortos de encaste, en que todo el grupo de hembras está expuesta al mismo tiempo, por lo que se puede evaluar en forma clara el resultado final de dicha actividad. El inconveniente es que esto se logra una vez finalizado el encaste y un mal resultado no se puede corregir hasta la temporada siguiente.

En lechería cuyos partos ocurren durante todo el año, esto no es tan fácil puesto que en todo momento habrá hembras en diferentes etapas de su ciclo reproductivo, de modo que al entremezclarse se dificulta la obtención de indicadores claros y concluyentes.

Se utilizan varios indicadores que deben combinarse puesto que cada uno tiene ventajas y limitaciones, por ejemplo:

Lapso Interparto (LIP). Refleja el rendimiento reproductivo de los últimos 9 a 24 meses, y solo considerando las hembras que lograron preñarse y ya han parido. No incluye por tanto las de primer parto, las que aún no se han preñado ni las que se eliminan por no preñez. Al considerar el LIP futuro, pueden incluirse aquellas de primer parto, pero siempre dejando fuera las que no se preñan.

Lapso Parto Preñez (LPP). Por medir los días promedio entre el parto mas reciente y la fecha de concepción siguiente a él, igualmente deja fuera aquellas que no se han preñado, al tiempo que es una medida del rendimiento reproductivo de doce meses aproximadamente lo cual no permite identificar claramente los períodos en que se producen las diferencias de fertilidad.

Así, por ejemplo puede darse la paradoja que vacas que permanecen abiertas por períodos prolongados no sean consideradas en el LPP, induciendo a que este resulte falsamente mejorado, y en el momento en que se preñen lo cual es un hecho positivo sin embargo inducirá en un alargamiento de este índice en el periodo en que ello ocurra.

El resultado dependerá también finalmente del criterio de eliminación en cuanto a plazo que se puede otorgar para lograr la preñez.

Lapso Parto Primer Servicio: No reflejaría en el momento indicado un atraso puesto que no cuentan para este índice sino hasta que sean cubiertas. O sea un período de atraso vendría a reflejarse erróneamente en un momento posterior.

Indice coital: Se refiere a número de servicios por vaca preñada. Igualmente no incluye aquellas que no se preñan, pudiéndose así trasladar los resultados a períodos distintos al momento real de fertilidad

En todo caso, todos ellos reflejan en resumen un promedio acumulado de períodos mas o menos extensos por lo que las variaciones producidas son 'amortiguadas ' por el total.

En atención a estos inconvenientes, este trabajo pretende agregar nuevos parámetros que permitan evaluar en mejor forma este aspecto del funcionamiento de una lechería, utilizando los registros normales que son exigibles para el normal desenvolvimiento de cualquier plantel lechero.

Metodología

En primer término y como forma de situarse, se debió definir modelos o patrones de comportamiento que reflejen el grado de cumplimiento de metas en el tiempo (Porcentajes de preñez alcanzados según progresa la lactancia), calificados de acuerdo a un criterio de eficiencia, como el propuesto a continuación por el autor, basado en diferentes parámetros de eficiencia encontrados en la literatura generalmente como metas a cumplir, por lo tanto aplicables a las categorías altas. Por este motivo se tuvo que completar y diseñar nuevas curvas en un proceso iterativo de ajustes y simulaciones de forma que concordaran además con otros parámetros asociados a ellos. Cuadro 1 y Figura 1.

De este modo, podemos tipificar cinco categorías de eficiencia reproductiva:

Optima - Buena - Regular - Mala y Pésima, definidas por sus diferentes porcentajes de preñez alcanzados en lapsos post-parto de 75 - 90 - 120 - 150 y 240 días. Esto entregaría el porcentaje que no se preña, considerando como un criterio lo que sobrepasa los 305 días.

En la práctica, en rebaños de mala fertilidad, se debe prolongar este período de tiempo para lograr disminuir este tipo de eliminación, obteniéndose lactancias prolongadas con menores rendimientos.

En la figura 1 se grafican las cifras entregadas en el cuadro 1, de acuerdo al autor, entregándose los rangos en que operan las diferentes categorías de eficiencias.

Así se podría tipificar el comportamiento reproductivo de un rebaño, analizándolo por grupos de parición de uno o más meses, sin embargo esto constituiría un procedimiento engorroso de utilizar en forma práctica y ágil como es el objetivo buscado.

La importancia de este modelo, está en que a partir de el se pueden encontrar los valores de referencia para calificar los valores correspondientes para otros parámetros de uso mas directo, lo importante es que entre ellos sean concordantes para calificar las situaciones presentadas.

CUADRO N º1  Calificación de la fertilidad de un rebaño según tasas de preñez a diferentes días en lactancia.

Días Lactancia 75 90 120 150 240 Sin Preñez
CALIFICACIÓN TASAS DE PREÑEZ PROMEDIO
Óptimo >50 >65 >85 >95 >98 2
Bueno - - - - - 4
- 35 46 65 75 85 -
Regular - - - - - 10
- 21 30 46 58 80 -
Malo - - - - - 17
Pésimo

< 12

< 18

< 28

< 40

< 67

25

Otros indicadores propuestos

Indice de Fertilidad Instantánea de Berchtold

Este índice es de extraordinaria utilidad puesto que constituye una instantánea del momento reproductivo que tiene un rebaño en un momento determinado, ya que entrega su valor considerando la totalidad de las hem­bras de un plantel según su condición de estar o no gestantes. 

INDICE DE FERTILIDAD DE BERCHTOLD TABLA N°- 1 Cifras de fertilidad en vacas no preñadas en relación con el intervalo

transcurrido desde el último parto. Las cifras encuadradas reciben un prefijo negativo.

Días

0

1

2

3

4

5

6

7

8

9

70

100

100

100

100

100

99

99

99

99

99

80

99

99

99

99

99

98

98

98

98

98

90

97

97

97

96

96

95

95

95

94

93

100

93

92

91

91

90

89

88

87

86

85

110

84

83

81

80

78

77

75

74

72

70

120

68

66

64

62

60

78

55

53

50

48

130

45

42

40

37

34

31

28

25

22

19

140

16

13

10

6

3

0

3

6

10

13

150

16

19

22

25

28

31

34

37

40

42

160

45

48

50

53

55

58

60

62

64

66

170

68

70

72

74

75

77

78

80

81

83

180

84

85

86

87

88

89

90

91

91

92

190

93

94

94

95

95

95

96

96

97

97

200

97

98

98

98

98

98

99

99

99

99

210

99

99

99

99

99

99

100

100

100

100

Toda vaca gestante o hasta 74 días abierta recibe un valor de 100. A medida que aumenta sus días abiertos este valor va disminuyendo hasta 0 el día 145, posterior mente va tomando valor negativo en aumento hasta -100 el día 216 y posteriores. Esto elaborado estadísticamente basado en una curva normal

De esta forma, se puede elaborar un gráfico de fertilidad con valores mensuales que irán variando básicamente por el aumento de días abiertos de las no gestantes en el período y por aquellas que mejoran su índice al lograr la gestación.

De todos modos, aunque este índice tiene la ventaja como se describió de incluir la totalidad de las hembras y constituir un parámetro objetivo para reflejar cambios periódicos, mantiene su carácter de arrastrar el resultado de períodos anteriores; persistiendo la necesidad de utilizar otro indicador mas específico.

a) Reinicio temprano de la funcionalidad ovárica, y una eficaz detección de celos. b) Eficiencia en la inseminación

Esto se puede evaluar a través de los siguientes parámetros:

1. Tasa de cubierta: Número de vacas observadas en estro y cubiertas dentro de un período/ Número de vacas disponibles o abiertas al comenzar este. (Aquellas que cumplen el período voluntario de espera una vez iniciado, deben contabilizarse proporcionalmente.)

2. Tasa de concepción : Número de vacas preñadas / Número de vacas cubiertas en el período.

3. Tasa de preñez: Número de vacas preñadas en el período / Número de vacas abiertas al comenzar el período.

CUADRO 2  Calificación de la situación reproductiva de un rebaño de acuerdo a diferentes índices

CALIFICACION T. De Preñez I. De Berchtold LPP
Óptimo >= 50 % >= 95%

< = 90 d

Bueno 32-50% 85-95% 90-110 d
Regular 22-32% 75-85 % 110-130 d
Malo 15-22% 65-75% 130-150 d
Pésimo < = 14 % < = 64 % >=150 d

Parámetros de Evaluación Mensual

El logro del objetivo final, cual es lograr la preñez del rebaño dentro de los períodos deseados radica en poder controlar la concurrencia de dos even­tos reproductivos asociados con este resultado. Ellos son:

De los dos primeros, la presentación de detección de celos posee el mayor impacto en el comportamiento reproductivo. Barr (1974) encuentra que el período abierto tiene una correlación del 0,92 con respecto a la eficiencia en la detección de celos y de 0,38 respecto de la tasa de concepción. A través de este índice, se estará evaluando la presentación real de celos (factor fisiológico), en combinación con su detección (factor de manejo).

Debe mencionarse que aunque el ciclo sexual es de 21 días, por razones prácticas el cálculo de estos parámetros hace necesario realizarlo mensualmente de modo que un porcentaje de vacas tendrá oportunidad de presentar dos celos o inseminaciones en un período, contabilizándose por uno solo, de lo cual la tasa de concepción tendrá una ligera diferencia con la real (+ 8% aprox.) Esto se representa por medio de un ejemplo real en la figura 2, la cual refleja en forma sensible las variaciones que sufren en cada período los parámetros desarrollados.

Podrá observarse en el ejemplo y en la práctica., que la tasa de preñez final está correlacionada en mayor grado con la tasa de inseminación que con la de concepción.

En el siguiente cuadro, se califican los resultados tanto del Indice de Berchtold, la Tasa de preñez, y se agrega el correspondiente LPP, todo en concordancia con los modelos propuestos en la Figura 1.

Cabe mencionar, que realizando los cálculos pertinentes , con una tasa de preñez mensual de 25 % o índice de fertilidad de 75 %, y considerando una mortalidad de 20 % desde nacimiento a primer parto, estaría el límite para poder reponer la eliminación y dejar un excedente para selección y/o venta.

También es importante conocer los rangos en que operan tanto la eficiencia de cubiertas y de concepción para determinar la tasa de preñez lo cual constituye el objetivo final perseguido.

TABLA N° 2 INDICE DE FERTILIDAD DE BERCHTOLD Cifras de fertilidad en vacas no Preñadas en relación con el intervalo transcurrido desde el último parto. Las cifras encua radas reciben un prefijo negativo.

 

Así, podemos observar por ejemplo que para lograr una fertilidad buena, se requiere corno mínimo una tasa de cubierta del 50%, siempre que la tasa de concepción alcance un mínimo de 70 %., si la tasa de concepción en cambio es del 60%, requiere una tasa de cubierta del 60%.